ROSARIO.-Un piloto de 46 años, exempleado de la firma que se dedica a la venta de oxígeno medicinal Air Liquide, despegó a las 11.50 del aeroclub de Alvear, a unos 20 kilómetros de Rosario, y minutos después la avioneta se estrelló contra la planta de la compañía donde el hombre había trabajado hasta hace unos meses. Se sospecha que el piloto podría haber impactado la avioneta biplaza Cessna 152 de manera intencional. El único ocupante de la aeronave murió en el acto debido a la caída, que provocó un incendio, pero ninguno de los empleados de Air Liquide resultaron heridos, ya que fueron evacuados de manera inmediata, tras la explosión.
Unas horas después del siniestro, la Fiscalía de Rosario reveló la identidad del piloto fallecido. Su nombre era Juan Manuel Medina, de 46 años. Según revelaron fuentes de la investigación, algunas personas allegadas a este hombre señalaron que por la aplicación de mensajería Whatsapp había dado indicios de que podía tomar una decisión trágica. Horas antes de su muerte en su estado de la red social tenía una foto con una gran explosión. Esto abona la principal hipótesis que se centra en que Medina podría haber provocado la caída del avión para dañar la fábrica donde había trabajado.
Air Liquide es una empresa multinacional de origen francés, que es líder mundial en gases, tecnología y servicios para la industria y la salud. Tiene una planta en avenida Presidente Perón 7680, en la zona oeste de Rosario. En ese predio cayó este viernes al mediodía una avioneta y su piloto falleció.
La fiscal Mariel Oliva, que está a cargo de la investigación y estuvo presente en el lugar del supuesto atentado, tiene entre sus hipótesis la posibilidad de que el choque de la avioneta contra la sede de la empresa haya sido intencional. Los videos que trascendieron por las redes sociales muestran que la aeronave se dirige directo contra la planta. No parece que tuviera desperfectos técnicos, aunque esta hipótesis está en pleno proceso de investigación.
Luego del impacto de la Cessna 152, cuatro dotaciones de bomberos concurrieron al lugar, donde arrojaron espuma para apagar el incendio que se desató por el combustible que llevaba la avioneta. Sin embargo, según las fuentes, las llamas no lograron afectar la zona donde se encuentran los gases y los tanques de oxígeno, algo que podría haber provocado una catástrofe. Una hora después, los bomberos lograron dominar la situación, pero a modo preventivo evacuaron a los vecinos de la zona y a todos los empleados de la firma.
“Se escuchó un ruido fuerte, vimos que la avioneta venía dando vueltas. Casi se lleva puesta la antena de Tersuave, después pareció perderse y se escuchó un ruido muy fuerte. Empezamos a escuchar la sirena de Air Liquide y vimos que empezó a salir la gente corriendo desesperada”, relató un vecino de la zona.
El jefe de la Unidad Regional II, Daniel Acosta, sostuvo que el operativo ante esta situación crítica apuntó a evacuar a los empleados de la fábrica con los bomberos y dar aviso a las empresas linderas para sacar el personal.
Según fuentes de la investigación, Medina despegó al mediodía con permiso para volar del aeroclub de Alvear, pero –según trascendió- no tenía autorización para sobrevolar esta zona urbanizada. Su objetivo, de acuerdo a los primeros pasos en la pesquisa, es que habría provocado un atentado contra la empresa, de la que no se habría ido en buenos términos. La tragedia pudo ser mucho peor.
El director de Protección Civil de la provincia, Marcos Escajadillo, que la avioneta no hizo explotar los tubos de oxígeno de casualidad. “Lo que evitó una tragedia fue que había una columna de hormigón que impidió que la aeronave impacte sobre los depósitos donde están acopiados los tubos de oxígeno, que se encuentran a muy poca distancia del lugar donde golpeó la avioneta”.